Episodio #1 (((Santiago Sierra y "Los Penetrados")))

I.
El poder de uno sobre otro es lo que ha mantenido la relación de hombre Vs hombre (o mujer en cualquiera de los casos) con el pasar de los años. Lo que Sierra realiza es un ejemplo claro de este encuentro.

Lo que despierta interés en las fotografías revisadas son las relaciones sexuales anales, donde el hombre, en cualquiera de los casos, tiene el poder sobre alguien más.

Cuidando el contenido estético, Sierra abre una de las puertas ante las posibilidades del racismo y de los inmigrantes. De esta forma reafirma el vínculo de las prácticas artísticas con las realidades sociales y/o políticas, al mismo tiempo que construye uno de los tantos horizontes estéticos que a lo largo del Arte contemporáneo se han venido trazando.
El hecho de que un negro esté “por encima” de un blanco o viceversa (en cualquiera de los géneros), trajo a mi cabeza momentos históricos en los cuales mueren personas por diferencias raciales o la aceptación de diversas asociaciones que se crean para mantener este tipo de intolerancia (e.g. Skinheads, KKK, The Bloods, The Crips). No es algo nuevo, así ha sido la historia desde que el hombre existe.

II.

Es interesante el análisis que puede surgir al abordar este tipo de obra, comparada con lo que hace Spencer Tunick. El hecho de reunir a tal cantidad de gente y llenar calles o plazas públicas se convierte en lo que constituye su trabajo: “la emoción que provoca la desnudez, el amor al cuerpo.” Sin embargo su obra no es el resultado, dígase la fotografía, sino la instalación de cuerpos desnudos donde se conocen las historias de las personas. El cuerpo como necesidad de poseer la libertad de expresión, buscando así la desnudez tanto corporal como mental. El sujeto se transforma, supera complejos o simplemente sacia su morbosidad.

III.

La obra de Sierra reúne aspectos de poder, dominación y control construido en un espacio cultural, dando como resultado un campo de batalla artístico-político. Tal vez la idea de utilizar las relaciones sexuales como elemento principal de poder, más la capacidad de elección que llevó a los participantes a querer mostrar su cuerpo, den como resultado una obra que va más allá de lo que se muestra. Si bien los cuerpos sin rostro se exhiben en una posición que si bien es grotesca para algunos, para otros es excitante, no cabe duda que la obra de Sierra da caminos por los cuales los espectadores podemos avanzar, detenernos y girar la vista hacia el otro lado y preguntarnos ¿Político?, ¿Pornográfico? ó ¿Arte?

“Los penetrados” también podría tener una lectura sobre la igualdad social y/o racial resultante del encuentro de dos personas ya sea del mismo o diferente sexo ó del mismo o diferente color de piel.

El Arte y la Política siempre se han necesitado, se envuelven mutuamente, a veces uno pregunta y el otro contesta, uno abre un sin fin de posibilidades que el otro cierra, a veces uno duda y el otro afirma. El Arte se establece como una severidad frente a discursos que se pensaban únicos.

Pero no siempre tiene que ser así.

Acéptelo, critíquelo, siéntase aludido u ofendido. Destrócelo o alábelo.

Para eso está el Arte. “Siempre al servicio de la comunidad”.