La segunda mitad del siglo XX siguió trayendo una serie de cambios en el desarrollo de las nuevas sociedades, así como la constante aparición de nuevos movimientos artísticos. Las segundas vanguardias tuvieron auge en París y Nueva York concentrándose principalmente en el arte mismo, cuestionando la labor de los museos y la obra de arte en sí.
La mayoría de los artistas tenían una formación filosófica y teórica, lo que se vio reflejado en sus producciones, rompiendo con las “reglas” acerca de lo que hasta esos años era considerado arte. El cual se convierte en un símbolo de posición social y las obras de arte comienzan a venderse a precios descomunales convirtiéndose así en mercancía con lo cual muchos movimientos estarán en contra como el Arte Conceptual.
Sin embargo para este texto me concentraré en el movimiento que me agrada más y que me llama más la atención por todo lo que implica (movimiento, trazos e ilusiones ópticas)
El Op-Art surge en Estados Unidos en 1958 y se caracteriza por las sensaciones de movilidad en superficies bidimensionales, engañando al ojo humano mediante estructuras de repetición que genera una respuesta dinámica del ojo y una reacción psicológica. Existen patrones creados con ayuda de cubos, líneas y círculos concéntricos con ayuda de colores, luces y sombras para ampliar los efectos de movimiento en superficies planas convirtiéndose en espacios tridimensionales.
Son obras físicamente estáticas y hacen uso de líneas paralelas, rectas, sinuosas, cambios de formas y tamaños, uso de figuras geométricas y contrastes cromáticos, entre otros elementos que utilizaban para crear efectos de vibración y movimiento aparente.
Uno de los máximos exponentes del Op-Art fue Victor Vasarely quien escribió el “Manifiesto Amarillo”.
Dicho manifiesto fue publicado en 1955 donde sentaba las bases del nuevo arte afirmando que El futuro nos reserva la felicidad en la nueva belleza plástica, móvil y conmovedora, Con esto afirmaba que el nuevo arte huía de la subjetividad y buscaba representar al mundo a través de formas universales.
La mayoría de los artistas tenían una formación filosófica y teórica, lo que se vio reflejado en sus producciones, rompiendo con las “reglas” acerca de lo que hasta esos años era considerado arte. El cual se convierte en un símbolo de posición social y las obras de arte comienzan a venderse a precios descomunales convirtiéndose así en mercancía con lo cual muchos movimientos estarán en contra como el Arte Conceptual.
Sin embargo para este texto me concentraré en el movimiento que me agrada más y que me llama más la atención por todo lo que implica (movimiento, trazos e ilusiones ópticas)
El Op-Art surge en Estados Unidos en 1958 y se caracteriza por las sensaciones de movilidad en superficies bidimensionales, engañando al ojo humano mediante estructuras de repetición que genera una respuesta dinámica del ojo y una reacción psicológica. Existen patrones creados con ayuda de cubos, líneas y círculos concéntricos con ayuda de colores, luces y sombras para ampliar los efectos de movimiento en superficies planas convirtiéndose en espacios tridimensionales.
Son obras físicamente estáticas y hacen uso de líneas paralelas, rectas, sinuosas, cambios de formas y tamaños, uso de figuras geométricas y contrastes cromáticos, entre otros elementos que utilizaban para crear efectos de vibración y movimiento aparente.
Uno de los máximos exponentes del Op-Art fue Victor Vasarely quien escribió el “Manifiesto Amarillo”.
Dicho manifiesto fue publicado en 1955 donde sentaba las bases del nuevo arte afirmando que El futuro nos reserva la felicidad en la nueva belleza plástica, móvil y conmovedora, Con esto afirmaba que el nuevo arte huía de la subjetividad y buscaba representar al mundo a través de formas universales.
La composición pura es todavía una plástica plana de elementos rigurosamente abstractos, poco numerosos y expresados con escasos colores… Pero por efecto de perspectivas opuestas, esos elementos hacen surgir y desvanecerse sucesivamente una “sensación espacial”, y con ella la ilusión del movimiento y la duración. “Forma y color se hacen uno”. La forma no puede existir hasta que queda señalada por una cualidad coloreada. El color no es una cualidad hasta que se delimita en forma. El trazo es una ficción que no pertenece sólo a una forma-color, sino a dos a la vez.
La mayoría de los trabajos de los artistas del Op-Art son guiados por una búsqueda de un arte científico fundado en un conocimiento de las formas, las leyes de la física y las percepciones de los colores, donde el agrado de ver este tipo de obras radica en la extrañeza visual que producen y la seducción del engaño perceptivo que se encuentra en cada una de ellas.
Les dejo un video de más obras de Vasarely.
Les dejo un video de más obras de Vasarely.
Bilbiografía consultada:
Amalia Martinez, De Andy Warhol a Cindy Sherman, Arte del Siglo XX, tomo II en: http://books.google.com.mx/books?id=dfBHZuN4pKsC&pg=PA53&lpg=PA53&dq=manifiesto-Op-art&source=bl&ots=q_ch01GRnp&sig=NcaiBrtyZ4F72hafU3J71J-FVDw&hl=es&ei=WJjuSfTuEYqmM9n7tfEP&sa=X&oi=book_result&ct=result&resnum=9#PPP1,M1
0 terrestres dicen...:
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